“Sigue adelante contra viento y marea”, fue una de las frases de aliento que el padre del pelotero dominicano José Ramírez decía a su hijo, quien soñaba con ser como los jugadores que veía en la televisión cuando era pequeño; mientras que su madre bromeaba con el diciendo que iba a ser demasiado pequeño para conseguir serlo, ya que su padre es de baja estatura.
José confiado en lo que quería ser en la vida no paró de soñar, hasta convertirse en lo que es hoy, un tremendo jugador de Grandes ligas, y no es que saliera pequeño, ya que mide 1.75 metros de estatura, tamaño considerado bastante aceptable para desempeñarse en esa carrera.
El padre de Ramírez ha sido el coach espiritual en su carrera, animándolo y guiándolo siempre por el buen camino. "Mi papá siempre me decía 'fíjate en los peloteros que son chiquitos', pero han llegado allí''' (a la cumbre del diamante). Cuando me dieron la oportunidad de jugar en Grandes Ligas, le agradecí a mi papa por sus consejos y él me contestó 'tranquilo que todavía tienes metas por cumplir” expresó Ramírez.
Su debut en Grandes Ligas fue en el 2013 con 21 años de edad por los Cleveland Indians, actualmente el oriundo de Baní, República Dominicana, ha tenido un año excelente, ya que ha mostrado una línea de .312 / .355 / .423 a partir del 8 de julio del presente año.
